El
conductor no es nada si los elementos de la conducción no están preparados
y capacitados para ser conducidos. Y no hay conducción que pueda fracasar
cuando la masa que es conducida tiene en sí misma el sentido de la conducción.
Por eso, conducir es difícil, porque no se trata solamente de conducir. Se
trata, primero, de ORGANIZAR; segundo, de EDUCAR;
tercero, de ENSEÑAR; cuarto, de CAPACITAR,
y quinto de CONDUCIR. Eso es lo que nosotros debemos
comprender.
En lo días que transcurren la conducción es la base fundamental para lograr guiar nuestro movimiento hacia victoria, hoy los jóvenes nos acercamos a la política con esas ansias de satisfacer esas ganas militar, participar de este cambio cultural que se está gestando en la enormes cantidades de jóvenes que forman partes de un montón de organizaciones políticas, culturales y sociales a lo largo de la argentina.
Este presente no demuestra que la juventud es la voz del cambio, de la participación, del acompañamiento democrático que ya no se calla antes las desigualdades que pretende construir un proyecto participativo con el fin de favorecer en bien común de todos aquellos que están desprotegidos.
No somos títeres
como dicen algunos somos los jóvenes que degustamos en nuestros paladares la política….